La Investigación empresarial se ha hecho mayor. Ya no es investigación de mercados, ahora es Investigación de Marketing, y sus nuevas hermanas, la Investigación para la Innovación y la Investigación para la Estrategia, le dan un nuevo y fuerte impulso.
En el camino se han quedado todos los estudios pequeños, los que se basaban en preguntar a las personas sobre temas que apenas les interesaban, los que apenas conseguían engagement, los cumplimentados de cualquier forma. Con ellos se han ido las dudas de los que nunca creyeron en la investigación, que si había que vigilar al que respondía, que si había que hacer la encuesta anónima, ….
Todas las preguntas pequeñas ya no tienen sentido en la Investigación, con mayúscula. Cuando preguntas lo que a la gente le interesa, lo que puede cambiar y mejorar su futuro o el de sus familiares, cuando las preguntas son relevantes, el engagement llega solo, con fuerza.
La nueva Investigación también viene acompañada de nuevas técnicas que superan a las anteriores. Las comunidades privadas de investigación, animan por fin la investigación directa de las marcas con sus públicos objetivo, en nuevos formatos más experienciales, más cualitativos, más observacionales, … El antiguo consultor-intérprete desaparece, la investigación es directa marca-cliente, es otro touch point que da una nueva oportunidad de crear vínculos de valor.
En la nueva Investigación, el mundo digital es un gigante, habilitador de nuevas soluciones y canales de investigación, se convierte en un fin de investigación en sí mismo, con la Netnografía, la observación del mundo digital.
Un nuevo universo lleno de posibilidades.